En lo único que el festival sale ganando (si no tomamos por triunfo la aportación de 31 piezas) es en que no podremos recomanarnos hasta la extenuación el bucle lupino, la reiteración chisposa que es nuestra segunda marca de identidad (solo 30 segundos!!!), claro que igual ya estoy dando demasiados detalles e igual alguien ya esta pensando en montarse las fourteen. Triunfarías.
De todas formas y como siempre, estos 31 cortos que aparentemente van al festival forman parte de otro proyecto monumental de esos en los que acostumbramos a liarnos, con lo que el trabajo realizado nos va a recompensar por partida doble, y eso sin perder otro de nuestros valores, cabrear al festival.
PD: A veces el corrector interpreta a Zertin por pertinaz, pues joder, no se equivoca.
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